Descripción
La impresión Térmica Directa aplica calor directamente desde el cabezal de la impresora sobre la superficie de la etiqueta y esta cambia de color por medio de una reacción química al contacto con el calor, estas impresiones son mucho más sensibles a la luz, al calor y humedad.
Pese a que la impresión es poco duradera y resistente en ambientes adversos, su simplicidad de explotación y su coste han llevado a que se impusiera para actividades relacionadas con el retail, y en general con todo tipo de impresos, recibos y etiquetas cuyo uso no se alarga en el tiempo, ya que la insolación, la corriente estática o el calor pueden ensombrecer o incluso hacer desparecer la impresión.